CRITICA EN LINEA 

 

S E C C I O N E S

EPASA EN LINEA

PANAMA AMERICA

DIAaDIA EN LINEA

REVISTA SIETE!


primera plana

portada

al cierre

nacional

política

opinión

el pueblo habla

comunidad

provincias

nuestra tierra

deportes

el mundo

viva

vida nueva

sucesos

 

CRITICA
 
FAMILIA
  OPINI�N


La joya que perdió el árabe

Hermano Pablo | Reverendo

Se cuenta que, cruzando el desierto, un viajero vio a un nómada sentado al pie de una palmera. A poca distancia descansaban sus caballos, pesadamente cargados con objetos de valor.

El viajero se le acercó y le preguntó:

-�Puedo ayudarle en algo? Me parece verlo muy preocupado.

-Tiene razón -respondió el árabe-. Estoy muy afligido porque acabo de perder la más preciosa de las joyas.

Extrañado, el viajero preguntó:

-�Y qué joya era esa?

-Era una joya como no volverá a hacerse otra. Estaba tallada en un pedazo de piedra de la vida, y había sido hecha en el taller del tiempo. La adornaban 24 brillantes, alrededor de los cuales se agrupaban 60 joyas más pequeñas. Prenda igual no podrá producirse jamás.

-Su joya debió haber sido preciosa -repuso el viajero-. �Pero no cree que con suficiente dinero se pueda fabricar otra igual?

-�Imposible! -exclamó el árabe-. Es que la joya perdida era un día, y un día que se pierde no vuelve a recuperarse jamás.

Moisés, el legislador de Israel, le pide a Dios: �Enséñanos a contar bien nuestros días, para que nuestro corazón adquiera sabiduría� (Salmo 90: 12).

Hay tres días en la vida de todo ser humano: ayer, hoy y mañana. El día de ayer no lo volveremos a vivir jamás. Una vez que se cumplan las 24 horas del día, cae para siempre en el pasado irrecuperable.

El día de mañana no nos pertenece. El futuro pertenece al Autor del tiempo y de la vida. Desperdiciar el día de hoy, sólo porque habrá un mañana, es no reconocer que ese mañana no es nuestro.

El único día que es nuestro es hoy. El hoy se nos ha dado con dos propósitos: prepararnos un buen mañana aquí en esta tierra, y preparar nuestra alma para toda la eternidad. Si queremos disfrutar de un buen fruto mañana, tenemos que sembrar buena semilla hoy.

Este es el día más importante de nuestra vida. Como el nómada, reconozcamos el valor de este, nuestro día. Con Cristo en el corazón, tendremos quien nos enseñe cómo aprovecharlo para la vida eterna. Cuidemos esta joya como cuidamos nuestra alma.



OTROS TITULARES

Homenaje

Sin embargo, no acepto mi alcoholismo

Comentarios chorreranos

Listas negras

Préstamo de auto

La joya que perdió el árabe

Petróleo

 


 

  




linea
linea gris
 

   copyright © 1995-2008, CRITICA EN LINEA
todos los derechos reservados