"Cuartos de la gente pobre, con sus chiquillos descalzos; cuartos donde no entra el sol, que el sol es aristocrático".
Así se destaca una de las estrofas de la laureada poesía de Demetrio Herrera Sevillano, "Cuartos", y la cual cobra vigencia a diario en los viejos caserones de los barrios populares de las ciudades de Panamá y Colón.
Esas viejas estructuras que desafían al tiempo y a la modernidad aún en pleno siglo XXI albergan a una buena cantidad de familias, especialmente en los corregimientos de Santa Ana, El Chorrillo, Calidonia, Río Abajo y Pueblo Nuevo.
En horas de la mañana de ayer, martes, una residente de uno de esos viejos caserones localizado en la Calle 17 del corregimiento El Chorrillo, cerca de la Plaza Amador, resultó con fuertes golpes en la cabeza y otras partes del cuerpo al caer desde un segundo piso cuando se bañaba.
La señora Elizabeth Angélica Lorens, de 53 años, fue socorrida por paramédicos del Servicio de Emergencia 911 y del Cuerpo de Bomberos de Panamá, quienes la estabilizaron y trasladaron hasta el Hospital Santo Tomás, donde se encuentra estable.
La mayoría de esos caserones que hoy se encuentran en mal estado, se levantaron en la época de la construcción del Canal de Panamá para albergar a los trabajadores que laboraron en la edificación de la magna obra.
El paso del tiempo y la falta de mantenimiento hicieron que las otroras pintorescas edificaciones quedaran reducidas a verdaderas trampas de muerte que son constantemente asoladas por incendios y derrumbes.
Autoridades del Ministerio de Vivienda y Ordenamiento Territorial no descartan la posible demolición del vetusto inmueble.