En un macroproyecto vial, por un monto de 38 millones 300 mil dólares, se constituye la autopista centenario de acceso al segundo puente sobre el Canal, considerada una maravilla, y que está por culminarse, luego de tres intensos años de trabajo. Para los especialistas responsables de la magna obra, a finales del mes de junio se entregará al Estado panameño totalmente terminada.
El ingeniero Jamel Serracín, del consorcio Centenario, reveló que el tramo del sector Oeste tiene una extensión de 10 kilómetros, mientras que el de la capital abarca unos 14 kilómetros de distancia, eso significa que son 23 kilómetros de recorrido.
CUATRO PUENTES
"La autopista, además, tiene 4 puentes elevados de acceso vial. Entre las bondades, no habrá caseta de cobros por el uso de la vía, será una respuesta integral que solucionará en gran medida el congestionamiento vehicular en el área Oeste y la capital" argumentó el técnico.
Asegura que la entrega final de la obra está prevista para finales del mes de junio. Actualmente están en la etapa final de la construcción - colocación de carpeta asfáltica en los hombros, pintura de señalización e instalación de luminarias.
FASE DE LIMPIEZA DE PAVIMENTO
El encargado del proyecto adelantó que están en la fase de limpieza del pavimento, pintura de las señalizaciones y siembra de talud con grama en la orilla a lo largo del tramo para evitar la erosión, técnicamente se le llama hidro siembra para que así el trabajo no resulte afectado por las inclemencias del tiempo.
La fuente clamó a los usuarios de la autopista Arraiján La Chorrera comprensión por los inconvenientes que surjan a causa de la construcción del tramo de la etapa final que comunica con la importante vía; hasta el momento todo ha transcurrido con normalidad.
"Todos los problemas colaterales que se hayan generado por la construcción del tramo han sido subsanados paulatinamente y confía en que la obra finalizará con éxito en respuesta a la población", reitera.
SOLUCION A TRANQUES VIALES
El técnico optimista aseguró que el desarrollo de la obra reclamada por la ciudadanía en general será un gran componente para el desarrollo de la red vial en el país, principalmente en el sector Oeste, esto evitará el descomunal tranque vehicular que durante las horas picos se forma en la Interamericana.
Reconoció que tuvieron ciertos atrasos por la época lluviosa y otros inconvenientes administrativos que superaron y, al transcurrir el tiempo, finalmente la obra será entregada al servicio de la población en general.
Para Alis Baúles, el magno proyecto se ha constituido en una necesidad imperante para el país. El desarrollo beneficia a la sociedad en general; es importante que se haya contemplado la construcción de una autopista de esta magnitud.
NO HAY VALLAS DE RETENCION
"Lo preocupante es que en los hombros de la autopista no hay vallas de retención en ciertas áreas que tienen una altura peligrosa, y en un accidente automovilístico, que suele ocurrir en las vías rápidas, un auto puede precipitarse y caer sobre una vivienda", reiteró.
La fuente indicó que realmente las fallas son leves, se pueden corregir a través de los años, lo que se debe prever es cualquier accidente trágico por falta de medidas de seguridad. Esto le corresponde al Ministerio de Obras Pública (MOP), inspeccionar antes de la inauguración de la obra para así evitar tragedias.
OTRAS FALLAS
Una residente de estas áreas, asegura que otra de las fallas han sido los daños colaterales ocasionados por la remoción de tierra, a lo largo del tramo, a las viviendas que fueron afectadas por el desarrollo de la obra, en cierta manera un poco desordenado, que exigían indemnizaciones en compensación por los trabajos de canalización de las aguas por los deslizamientos de tierra.
De acuerdo con Mario Rojas, si bien es cierto el proyecto es una obra que promueve el desarrollo en el distrito, pero en realidad no beneficia, puesto que Arraiján por su posición geográfica quedará sumamente aislado.
"No estoy en contra del desarrollo, sin embargo, en qué beneficiará el proyecto. Al contrario, muchas comunidades como San Agustín resultaron afectadas con los trabajos de remoción de tierra; las calles quedaron intransitables", consideró.
Agregó que se convocaron innumerables reuniones con las comunidades; los afectados exigían que se les resarcieran los daños; algunos fueron subsanados, aunque hay quejas de incumplimiento por parte del consorcio encargado de la obra.