Un joven asiático asesinó ayer a tiros a 33 estudiantes de la Universidad Virginia Tech, en Blacksburg, y luego se suicidó.
El pistolero mató a una persona a eso de las 7:15 a.m. en los dormitorios de la universidad, y dos horas más tarde, llegó al salón de ingeniería del campus, y provocó la mayoría de las muertes. Otros 28 estudiantes resultaron heridos. Fue el más mortífero ataque a tiros en una universidad estadounidense.
Los tiroteos se producen tres días después de que dos amenazas de bomba obligaran también a desalojar parte del campus.