Un paso en falso o uno bien dado, pueden marcar la diferencia entre el triunfo o el fracaso, y a pesar de los resultados, dicen los adultos mayores, uno no se arrepiente de las cosas.
En Estados Unidos, un estudio realizado en la Universidad Northwestern señala que entre las decisiones que tomamos en la vida, las amorosas, son la principal causa de arrepentimiento (18, 1%).
Le siguen las relativas a la familia (15, 9%), la educación (13, 1%), la carrera profesional (12, 2%) y las finanzas (9, 9%). Las elecciones que menos lamentamos son las que tienen que ver con la espiritualidad (2, 3%), el tiempo libre (1, 5%) y con nosotros mismos (1%).
Neal Roese, investigador que llevó a cabo el estudio, reveló que el 44% de las mujeres se arrepiente de sus decisiones amorosas, frente a sólo el 19% de los hombres.
Las mujeres también se arrepienten más de sus decisiones familiares. Ellos, sin embargo, suelen lamentar más las elecciones relacionadas con la vida laboral (34% frente a un 27% de las mujeres).
El estudio también revela que nos arrepentimos más de no haber actuado en una situación pasada que de aquellas decisiones que conllevaban una acción.