Rosendo Montezuma, un indígena de 27 años que salió rumbo a Cuba para estudiar medicina, hoy atraviesa los peores momentos de su vida postrado en una silla de ruedas esperando ayuda de alguna persona en este país.
A pesar que su inteligencia le preparaba un buen futuro en la medicina, una extraña enfermedad le frustró su sueño.
Se graduó en el colegio secundario de Las Lajas en el distrito de San Félix y le otorgaron una beca para estudiar medicina en Cuba, sólo en su primer año de estudio padeció de una extraña enfermedad que lo ha dejado postrado en una silla de ruedas.
Su madre Bernilda Montezuma, comentó que en ese momento recién recibía una carta donde le señalaba que se encontraba bien, posteriormente le informaron que el estado de salud de su hijo era grave, estaba a punto de morir.
Movió cielo y tierra, aunque sin recursos económicos viajó en el 2001 a la isla caribeña para conocer qué había ocurría con Rosendo, casi no lo creía, no había recobrado el conocimiento y no la conocía.
Felipe Villareal, especialista en medicina interna y neurología que atendió el caso, explicó que el estudiante venía a morir a David, llegó con tubos nasogástricos y ahora se ha recuperado en un 70% con los medicamentos que la Caja de Seguro Social le ha proporcionado.
Detalló que tiene una enfermedad desmilinisante, una esclerosis múltiple que inclusive en Cuba no había el medicamento que se le está proporcionando en la actualidad.
Como especialista, manifestó que su diagnóstico ha mejorado grandemente, a su juicio la mejoría prácticamente ha llegado, porque es muy difícil esperar más, puesto que su capacidad mental es total.
La enfermedad dejó secuelas o consecuencias visuales y dificultad para caminar, porque en lo demás mejoró al 100%.
Villareal, sostuvo que las causas de la enfermedad se desconocen, pero es una patología que degenera y desgasta la mielina que corresponde a una proteína que funciona como control del impulso nervioso cerebral.