Ahora tiene variantes, pero siempre será la terapia tradicional china por excelencia, la acupuntura.
Consiste en insertar agujas desechables en lugares de la piel en los que se encuentran una serie de "meridianos" o canales de energía que la distribuyen por el cuerpo.
Las enfermedades que se pueden tratar con esta técnica china son migraña, reumatismo, artritis, artrosis, dolor lumbar y muscular, entre otros.
Los pro de esta terapia es que el efecto de la acupuntura es más rápido y se puede combinar con medicamentos naturales.
Aunque es un práctica bien recibida por los pacientes, hay algunas cosas que no se deben hacer como aplicarla a personas muy enfermas o débiles y tampoco en mujeres embarazadas.