Muchos hombres utilizan hoy día joyas y accesorios, que décadas atrás eran exclusivas de las mujeres. El hombre moderno, el que se ocupa de los hijos y cuida su vestimenta, empieza a interesarse ahora por los accesorios, a condición que las joyas que luce sean discretas, siendo su favorita la pulsera, según los profesionales del Salón Eclat de Mode, que se realiza hasta en París.
Algunas marcas especializadas en las joyas masculinas aparecieron a fines de los años 90, época en la que los especialista de la joyería femenina empezaron también a proponer, tímidamente, líneas específicas para los hombres.