Los conductores de transporte colectivo y selectivo, al igual que los vigilantes, se encuentran entre los grupos de trabajadores más expuestos a ser víctimas de las fechorías de los delincuentes.
De esto puede dar testimonio Gilberto Pino Thompson, de 38 años quien fue atacado por delincuentes que le infligieron heridas en el abdomen y ambos brazos cuando manejaba un bus en la comunidad de Kuna Nega, en el corregimiento de Ancón.
Pino Thompson tuvo que ser conducido en una ambulancia hasta el Cuarto de Urgencias del Hospital Santo Tomás, donde quedó recluido.