Los maltratadores tienen su castigo.
Eso se reflejó la semana pasada en Arraiján, cuando las autoridades policiales hicieron efectivas cuatro boletas de capturas a sujetos que habían demostrado la fuerza bruta en mujeres.
Según el reporte policial, las personas detenidas por violencia doméstica, amenazas y desacatos fueron conducidas a los respectivos despachos para los trámites correspondientes en esos casos.
Las mujeres afectadas no callaron la situación y denunciaron a sus parejas que abusaban de ellas constantemente, de manera física y verbal.
Las leyes panameñas castigan el abuso de los hombres contra las mujeres, con penas de prisión que van desde los 3 años hasta los 5, dependiendo de la gravedad del caso.
Si el hombre o la mujer son encontrados culpables, nada los salva de la cárcel.