Llegan las fiestas de fin de año y con ellas, el tiempo de celebración. Y para muchas personas nada es mejor que expresar la alegría por la llegada de la Navidad y el advenimiento del nuevo año, que el ruido y las luces multicolores de los juegos pirotécnicos.
Cada año, lugares como la Sala de Quemados del Hospital del Niño ven incrementado el número de pacientes atendidos con la llegada del mes de diciembre.
Según estadísticas de los últimos años, el incremento rondaría hasta el 75% de menores atendidos por quemaduras.
Normalmente el centro hospitalario atiende entre 15 y 20 casos mensuales por quemaduras, no sólo por bombitas, sino también por otras sustancias y casos fortuitos como incendios.
Juan De Arco, del Departamento de Seguridad del Cuerpo de Bomberos de Panamá, reveló que la prohibición de venta de juegos pirotécnicos a menores, también es extensiva a las personas en estado de embriaguez.