Fernando Trapero, el guardia civil español que se encontraba en coma profundo desde el atentado de ETA del pasado sábado en Capbreton (Francia) y que costó la vida a su compañero Raúl Centeno, falleció ayer.
El agente estaba ingresado en el hospital Cote Basque de la ciudad francesa de Bayona desde que fuera tiroteado el pasado sábado por tres presuntos integrantes de la organización terrorista ETA.
Por otro lado, el Ministerio francés detuvo a dos presuntos etarras sospechosos del atentado del sábado pasado que causó la muerte a los dos guardias españoles.