Su fútbol sigue creciendo como la espuma. La idea de los Estados Unidos de ser el país número uno en el fútbol es más que una meta, es todo un reto que quieren cumplir al menor plazo posible.
El plan trazado por el actual técnico de los "Gringos" Bruce Arena parece estar dando los resultados necesario. Desde que asumió su cargo, Arena ha implementado la idea de explotar los nuevos talentos, cultivar las experiencias y formalizar el liderazgo de grupo, todo esto con el objetivo de competir de tú a tú con las naciones más poderosas en el mundo, futbolísticamente hablando.
La implementación de una nómina híbrida en lo que va de las Eliminatorias de la CONCACAF rumbo al Mundial Alemania 2006, ha sido la clave primordial del buen momento que pasan los norteamericanos. La combinación entre el liderazgo que emana de veteranas figuras como Brian McBride y Earnie Stewart, con la juventud y el deseo de DaMarcus Beasley, Bobby Convey y Landon Donovan han ocasionado una explosión de buenos resultados.
UN GRAN AÑO 2004
Sin lugar a dudas, el 2004 ha sido un año de película para los norteamericanos. Su marca global de ocho triunfos, una derrota y 6 empates en 15 encuentros (8 válidos por la eliminatoria), impresionan hasta al más sabio del fútbol. Durante ese lapso, sus delanteros lograron perforar las redes contrarias en 28 ocasiones, mientras, que su valla fue batida tan sólo 9 veces.
Durante ese lapso, sólo Holanda pudo vencerlos en un partido que se jugó el 18 de febrero en Amsterdam y que finalizó 1 por 0.
INVICTOS EN LA ELIMINATORIA
Hasta el momento, su récord en la Eliminatoria del Mundial de Alemania 2006 está libre de mancha alguna. En los 8 partidos válidos para esta justa (2 en la segunda fase y 6 en la tercera etapa), Estados Unidos no perdió; ganó 5 y empató 3. Anotó un total de 19 tantos y permitió 5.
Sus goleadores en la última fase fueron Ed Johnson con 5 dianas, Landon Donovan con 4 y DaMarcus Beasley con 3.
Como dato curioso, es importante mencionar, que Arena ha utilizado un total de 27 jugadores en su proceso. No cabe duda, Estados Unidos será un hueso duro de roer en el Hexagonal.