El problema de la tina de oxidación, las porquerizas establecidas en el área y la descarga de las aguas del matadero municipal en el sector conocido como "El Sopropo" continúan afectando a los moradores de más de seis barriadas aledañas que aseguraron que ellos no pueden seguir viviendo con estos serios problemas de salubridad.
Después de la denuncia pública efectuada por parte de los afectados, se ha creado un conflicto entre las partes, ya que los dueños de las porquerizas no aceptan el plazo de un mes que les han dado las autoridades para que reubiquen esta actividad porcina, aduciendo que para poder hacer esto necesitan por lo menos un año y medio para poder sacar la producción.
Los moradores de las barriadas Camino al Cangrejal, Villa Nita, La Floresta, Silvia Rosa, Villa María, San José y Los Olivitos que se encuentran cerca del área de "El Sopropo", dijeron que ellos ya no aguantan esta situación porque algunos llevan más de cuarenta años padeciendo por la ubicación de las porquerizas.
Agregaron que en los últimos años el tema se ha agravado porque además confrontan la situación de las aguas negras y las aguas servidas por la ausencia de una tina de oxidación acorde con la realidad poblacional de esta zona, donde se ha urbanizado y hay muchas familias sufriendo estas consecuencias.
Lo señora Mitzi de Peralta, vocera de los moradores, dijo que no soportan los malos olores causados por las porquerizas y las aguas negras.
Los dueños de estas porquerizas deben entender que ahora este es un sitio poblado.