Sin Ibrahimovic ni Messi, el Barça fue fiel nuevamente al concepto futbolístico que diseña Pep Guardiola y firmó la mejor actuación de la temporada para derrotar claramente al Inter de Milán (2-0), lo que vale liderar su grupo en la Champions y prácticamente garantizarse su clasificación para octavos de final.
Dirigidos por un genial Andrés Iniesta, el Barça resolvió el primer partido complicado de la semana, con goles de Gerard Piqué y Pedro Rodríguez, y respondió de la mejor manera posible, al derrotar sin dudas al Inter de Mourinho.
Ni Ibra ni Messi jugaron un solo minuto y los azulgrana no echaron en falta ni a Zlatan ni a Leo. Guardiola no quiso arriesgarse y dejó a sus dos máximas estrellas, ambos con problemas físicos, en el banquillo. Es más en la víspera pidió la oportunidad de que equipo se reivindicara e intentara ganar sin ellos, su equipo entendió el mensaje, porque el Barça firmó un partido primoroso.