Más de 30 familias fueron desalojadas a la fuerza por la Policía Nacional, luego de permanecer como invasores dentro de los terrenos del ganadero Gabino Alvarado, próximo a la comunidad de Soloy.
Son las familias que se vieron afectadas con las inundaciones en septiembre de 2008, y a quienes el Gobierno les había prometido reubicarlos en un terreno que sería comprado para ese menester, pero esa promesa nunca fue cumplida y optaron por ocupar las tierras del sr. Alvarado. Los afectados amenazaron con cerrar la carretera Panamericana si en los próximos días no reciben una respuesta de este problema.