Un fallo de la Corte Suprema de Justicia que establece que el Estado no puede asumir los costos de ninguna franquicia, sirvió para que Cable & Wireless suspendiera a los diputados el servicio de telefonía fija que se enmarcaba dentro de las llamadas "franquicias" telefónicas.
La argumentación del fallo de la CSJ es que los costos del servicio deben ser cubiertos al 100% por la empresa prestadora del servicio.