Cerca de un millar de empresarios de 34 países participan desde ayer en el VII Foro Empresarial de las Américas, en Quito, mientras las protestas callejeras aumentan en contra del Area de Libre Comercio de las Américas (ALCA).
El vicepresidente de Panamá, Dominador Káiser Bazán, destacó ayer en la inauguración del Foro que la clave para el desarrollo y la competitividad es el libre comercio.
Instó a la construcción de un acuerdo regional basado en el consenso y respetuoso de la diversidad, que tome "muy en cuenta" la diferencias entre las economías.
De su lado, el presidente del comité organizador, el ecuatoriano Gustavo Pinto, aseguró que en las negociaciones sobre el ALCA "se mantiene como hilo conductor la transparencia y honestidad", algo con lo que no concuerdan los indígenas y otros sectores sociales que también deliberan en Quito sobre la creación de ese espacio de libre comercio en el continente americano para el 2005.
"Han transcurrido siete años del inicio de la idea del ALCA, han sucedido muchas cosas, probablemente el ritmo al que han sucedido ha sido muy lento, pero en los últimos meses el proceso de negociación ha tomado velocidad e importancia", destacó.
Instó a los empresarios del continente a tomar una posición "clara y definida" sobre el ALCA pues el "año 2005 está más cerca de lo que parece".
"No podemos dejar esta dificilísima tarea del proceso de integración para que sean sólo los gobiernos los que tomen las decisiones", dijo y añadió que dentro del ALCA "no hay países grandes ni pequeños".
El presidente de la Asociación Iberoamericana de Cámaras de Comercio, el ecuatoriano Joaquín Cevallos, señaló que los países americanos no pueden evitar que "el mundo gire", pero sí "escoger cómo girar" en el proceso de integración.
Durante la inauguración del Foro, Cevallos opinó que la cita debe marcar un hito para "hacer alianzas, crear puentes, compartir conocimientos, experiencias".
Recordó que "no hay ni habrá desarrollo económico sin desarrollo social" y calificó al ALCA como una ventana histórica de oportunidades para crecer equitativamente.
Pero mientras los empresarios aseguran que el proceso es transparente, legisladores del continente también reunidos en Quito cuestionan la poca información sobre sus beneficios y contratiempos.
El ex vicepresidente de Costa Rica Rodrigo Carazo dijo hoy en la cita de los parlamentarios que el proceso se debe suspender hasta que haya una información a fondo sobre el asunto.
La policía dispersó ayer con gases lacrimógenos una manifestación de estudiantes universitarios que intentaba llegar hasta un lujoso hotel de la capital, donde están reunidos los empresarios.
La policía detuvo al menos dos estudiantes durante las protestas en las que también intentó impedir la grabación de imágenes por parte de la televisión.
Las fuerzas del orden cerraron las vías de acceso al hotel a cuatro cuadras a la redonda, y colocaron a personal en pelotones en cada esquina, mientras en el Palacio Legislativo, donde se reúnen los parlamentarios del continente, también se ha redoblado la seguridad.
Lo propio ocurre en los alrededor del parque el Arbolito donde se concentran ya alrededor de mil indígenas que esperan a otros grupos para participar mañana, jueves, en una movilización por las calles de Quito en contra del ALCA, al que consideran una amenaza para las economías de los países pobres. Por otra parte, un grupo de mujeres protestaron quemando ropa frente a un local de comidas de McDonald.
Los indígenas aseguran que en el transcurso del día continuará ingresando gente que está apostada en las afueras de Quito y que se sumará a las protestas de mañana.
En tanto, otros representantes de movimientos sociales continúan participando en Quito en conferencias contra el ALCA, y analizando asuntos relacionados con la deuda externa, el militarismo y la migración, entre otros. |