En el despacho del magistrado Winston Spadafora, quedó radicada una demanda contenciosa administrativa de indemnización contra la Autoridad de Tránsito y Transporte Terrestre, presentada ante la Corte Suprema de Justicia por el abogado Víctor Martínez.
El letrado representa a la enfermera Lidia Atencio y al ebanista Luis Contreras, sobrevivientes del bus Corredor-Mano de Piedra, con placa 8B-06, que se incendió el 23 de octubre de 2006, suceso ocurrido a la altura de la vía Martín Sosa, frente al Templo Hossana y en donde murieron calcinadas 18 panameños.
Tienen derecho a que les pague una indemnización, de cinco millones de dólares para Luis y Lidia, indicó Martínez.
Por su parte, Luis Contreras, quien logró salvar su vida en forma milagrosa, señaló que deben ser llamados a juicio, -aparte de los transportistas Próspero y Ariel Ortega, al igual que el mecánico Edwin Jiménez- otras personas que tienen responsabilidad en este caso, en especial los ex directivos de la ATTT.
"Aquí estoy vivo y luchando para que a estos señores se les haga justicia", en alusión a los familiares de los caídos aquel lunes 23 de octubre de 2006.
Lidia Atencio, enfermera de profesión está segura que no solo deben ser enjuiciados los transportistas Próspero y Ariel Ortega, asi como el mecánico de refrigeración, Edwin Jiménez, sino gente de alta raigambre.