Los Heat de Miami tratan de superar la ausencia de Dwyane Wade, que sigue lesionado, y han conseguido de los Timberwolves de Minnesota al escolta-alero Ricky Davis y al pívot Mark Blount.
Después de haber tenido marca perdedora de 0-7 en los partidos de pretemporada, por primera vez en su historia, el entrenador Pat Riley, responsable técnico de los Heat, se convenció que era necesario un refuerzo inmediato antes que diese comienzo la temporada regular, el próximo 30 de octubre.