Tal como se lo habían anunciado a las autoridades y pese a ser desalojados a la fuerza el pasado miércoles, los precaristas de la barriada El Toro de Arraiján volvieron a levantar sus casas, de madera, pencas, cartones y zinc.
Un días después de los hechos, estos moradores aseguraron que son gente de escasos recursos y que vivían alquilados o con familiares, en la misma barriada.
Era la primera vez que se daba esto en el sector. El fin de semana decidieron invadir los terrenos, propiedad del Ministerio de Economía y Finanzas. Los mismos son clasificados como peligrosos porque fueron parte de un Polígono de tiro, creado por el ejército de Estados Unidos, cuando tenían bases militares en nuestro país.
Yadira González, vocera de la comunidad, manifestó que ellos seguirán allí y que están recogiendo firmas para demandar a la corregidora, porque el desalojo se dio sin ninguna orden.
"Anoche dormimos aquí debajo del aguacero y si el gobierno nos da otro lugar para vivir estoy dispuesta a irme de aquí", afirmó.
Ante esta situación funcionarios de los ministerios de Vivienda, de Economía y Finanzas y de la Autoridad Nacional del Ambiente se reunieron con los precaristas para buscarle una solución, pero fue imposible.
Los ánimos se caldearon por ambas partes ya que no se llegaba a ningún acuerdo.