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Los primeros indicios de la investigación indican que por la forma como fueron ejecutadas las víctimas, el caso guarda relación con el narcotráfico.  |
El colombiano José Felipe Mosquera Baloy y el panameño Manuel Cortés Aguilar, ambos de 43 años, fueron acribillados a tiros en plena vía Interamericana, a la altura de control 2, a unos 500 metros de Loma Cová. Los sujetos se desplazaban en el vehículo 4 runner matrícula 186880 desde el interior hacia la ciudad capital.
A la vista de los conductores y a plena luz del día, a eso de las 10 de la mañana de ayer, los asesinos que viajaban con las dos víctimas descargaron su arma sin compasión al estilo de la mafia, posteriormente abandonaron el vehículo y se dieron a la fuga en medio de un herbazal colindante con los tanques de reserva de combustible de las áreas revertidas.
Los primeros indicios de la investigación indican que por la forma como fueron ejecutadas las víctimas, el caso guarda relación con el narcotráfico. El colombiano recibió dos balazos en el abdomen, dos en la cabeza y uno en la pierna izquierda.
Mientras, que el panameño Cortés Aguilar, con residencia en el recién creado corregimiento de Burunga, Arraiján, fue ultimado de tres impactos de bala en el tórax y lo remataron con un balazo en lado derecho de la espalda que le causó la muerte instantáneamente. |