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Tropas israelíes penetraron el sábado en dos ciudades cisjordanas, después de las incursiones del día anterior, en lo que empieza a perfilarse como la más amplia operación militar israelí en un año de enfrentamientos. Ocho palestinos murieron.
Las incursiones, seis en tres días, fueron desencadenadas por el asesinato de un ministro del gabinete israelí por militantes palestinos, al inicio de esta semana.
Con la acción militar, Israel está tratando de presionar a la Autoridad Palestina para que arreste y entregue a los asesinos, y sofoque a los grupos de militantes palestinos.
El Departamento de Estado norteamericano declaró el viernes que las incursiones israelíes "complican la situación y deberían ser detenidas".
La intensificación amenaza los esfuerzos de Washington de retener el apoyo árabe y musulmán para sus acciones militares contra militantes islámicos sospechosos de la autoría intelectual de los ataques del 11 de septiembre. Estados Unidos corteja a los estados árabes moderados y teme que la violencia israelí-palestina pudiera interferir. |
