Comandos estadounidenses atacaron un campo aéreo y un complejo cercano a Kandahar en donde reside el líder supremo de talibán, el molá Omar, en una acción destinada a recoger material de inteligencia, informó el sábado un alto militar en Washington.
Fuerzas de elite terrestres realizaron un ataque relámpago contra una base aérea en Kandahar, sur de Afganistán, abriendo una nueva fase en la campaña militar iniciada el 7 de octubre, dijo el general Richard Myers, jefe del estado mayor conjunto de Estados Unidos. "La misión fue exitosa", agregó el militar.
Los comandos atacaron una base aérea y un puesto de los talibán en la región de Kandahar, bastión de la milicia fundamentalista en el sudeste del país, dijo Myers el sábado en una conferencia de prensa.
El militar dijo que dos paracaidistas resultaron heridos al saltar y señaló que Estados Unidos está analizando la información recogida en esta incursión.
"Uno de los objetivos era uno de los edificios en donde vive (el molá) Omar, un complejo (residencial) importante, un centro de control y comando de la dirección talibán", dijo Myers.
Omar es el líder de los talibán que gobiernan Afaganistán y se niegan a entregar al fundamentalista islámico Osama bin Laden a quien Washington atribuye haber tramado los atentados del 11 de setiembre contra Washington y Nueva York.
"No encontramos ningún alto responsable de la red Al Qaida", dijo Myers en alusión a la organización que lidera bin Laden.
"Atacamos y destruimos blancos asociados a actividades terroristas y al comando talibán. La misión fue globalmente un éxito", dijo Myers.
"Encontramos una oposición marginal. Hubo víctimas del otro lado", dijo sin dar cifras ni precisar porqué medios los comandos estadounidenses regresarán a sus bases.
EL PODERIO DE BIN LADEN
La escritora y periodista estadounidense Elaine Landau revela las claves del fundamentalismo islámico en su libro Osama Bin Laden: El terrorismo del siglo XXI. Autora de una decena de libros, entre los que destacan The new nuclear reality y The white power movement, Landau expone -tras una exhaustiva investigación- detalles sobre la red internacional del terrorismo islamita: sus entrenamientos, victorias militares y recursos financieros. Editorial Planeta accedió a entregar a la corresponsal de Proceso en Madrid las galeras del libro, que en las próximas semanas llegará a las librerías de España y Latinoamérica. Ofrecemos aquí algunos extractos:
Gran parte de la implicación posterior de Bin Laden en grupos terroristas surgió de su relación con Hassan Abdallah al-Turabi, el líder espiritual de Sudán. En muchos sentidos, Bin Laden se convirtió en uno de los favoritos de este líder religioso. Turabi trabajó con Bin Laden en el fortalecimiento de su desarrollo espiritual, mientras que Bin Laden ayudó a Turabi en sus planes para llevar a cabo una revolución islámica de largo alcance. Bin Laden aportó generosamente su tiempo y su capacidad para ayudar a fomentar el crecimiento del grupo de la jihad de Turabi, la Organización Internacional Popular (OIP). Turabi había definido la misión del grupo de este modo: "Desarrollar un plan de acción global para desafiar al Occidente tiránico, porque Alá no puede seguir en nuestro mundo, haciendo frente al poder absoluto del materialismo". En algunos momentos, la experiencia de Bin Laden en los negocios y las cuestiones financieras contribuyó a mantener activa la creciente red terrorista. |