Una encuesta en Internet ha revelado que Mel Gibson es el cristiano más poderoso de Hollywood. Gracias a sus proyectos cinematográficos que van de la mano de la fe, como "La Pasión de Cristo", el filme que relataba las últimas horas de la vida y agonía de Jesucristo y con el que en 2004 Gibson, director y productor de la polémica cinta, recaudó más de 300 millones de dólares en taquilla, otorgándole respeto no solo como actor y director, sino también como cristiano.