La falta de razonamiento, la inmadurez, el miedo y el enojo llevan a muchas mujeres y parejas a tomar decisiones erradas.
Uno de los actos más rechazados por las iglesias y gran parte del mundo es el aborto, pero a pesar de ello hay quienes lo siguen haciendo.
El aborto es una pérdida que puede generar consecuencias psicológicas tanto en la mujer como en el hombre.
El miedo y el enojo empujan a tomar esta decisión. Pero no sólo las mujeres sufren esta situación, muchos hombres se oponen a que sus parejas se deshagan de su bebé, manifestó la psicóloga Celeste González.
"Fue horrible, nunca estuve de acuerdo con este acto, pero mi ex novia pensó que era la mejor opción", dijo con lágrimas en los ojos Juan Pablo Jiménez.
Sólo tenía 7 meses de noviazgo con Verónica, cuando ésta salió embarazada. La noticia no les fue de mucho agrado, ya que ambos estudiaban, eran muy jóvenes (22 años ambos) y dependían de sus padres.
A pesar de ello, Juan nunca estuvo de acuerdo con un aborto, sin embargo Verónica no le importó la opinión de él y lo hizo. El resultado de esto fue que la relación terminó. "Siento que la odio por lo que hizo y ambos lo estamos pagando", expresó Juan con gran tristeza.
La psicóloga expresó que el aborto es una decisión que no se debe tomar a la ligera. "Hay que pensar en las consecuencias, se pone la vida en peligro. Hay que mirar hacia el futuro", dijo.
LAS CONSECUENCIAS
Los hombres también sufren las consecuencias de un aborto. Es normal sentir pena, tristeza y soledad. El problema se hace más serio cuando se llega a la depresión. Esta situación se presenta más cuando la mujer toma la decisión sin consultar a su pareja y no reconoce el derecho de él como padre, dijo González.
Por otra parte, también puede provocar la ruptura de la relación, ya que se va deteriorando poco a poco. Se pierde la confianza y nada vuelve a ser como antes.
RECOMENDACIONES
No cabe duda que es una situación que dura para toda la vida. Es muy difícil de superar.
Si estás en esta situación y no sabes qué hacer, te damos algunas recomendaciones:
- Busca ayuda profesional.
- Asiste a terapias, que te ayudarán a perdonarte a ti mismo.
- La parte espiritual, ayuda y reconforta mucho.
- Es necesario hablar con la pareja.
- Exterioriza lo que sientes.
Además, es importante el apoyo de amigos y familiares. La mayoría de las veces éstos tienden a juzgar. Grave error.
Se recomienda acompañarlos, brindarles apoyo, darle ánimos y si es necesario ayudarlos económicamente con las terapias.
El temor al qué dirán o a la reacción de los padres no debe ser la razón por la que decidas practicarte un aborto. No sólo le quitas el derecho de vivir a un ser que no pidió ser concebido, sino que te haces daño y a tu pareja.
Después de esto, ya nada vuelve a ser como antes. Analiza bien la situación y no tomes decisiones a la ligera.