Pablo Montero no sale de una para entrar en otra. El cantante aceptó someterse a un programa de rehabilitación por un año, durante la audiencia que se realizó en una corte de Miami, FL, por el cargo de posesión de cocaína, que surgió de su arresto el pasado 31 de agosto en South Beach.
Al cumplir con las condiciones de este programa, se desestimará la acusación y el artista mexicano evitará que se le quite el derecho de entrar a los Estados Unidos por período de hasta cinco años.
"Acepté la recomendación del juez de entrar a un programa en donde se quedará comprobando que mi estado de salud esté fuera de toda influencia tóxica. Asimismo informarles, que los resultados de mis análisis, realizados la semana pasada, dieron negativo", explicó el cantante de 38 años.
El programa incluye tratamiento para la dependencia de sustancias y consiste en asistir a terapia individual, dos horas por semana como mínimo, que incluye un examen de drogas dos veces por semana.
De no poder realizarse las pruebas, por estar fuera del país por razones de trabajo, Montero tendrá que suministrar una muestra de cabello a las autoridades, con la que se podrá detectar el uso de drogas hasta tres meses atrás.
"Al cumplir con este programa, una vez a la semana, no se verá afectado mi estatus legal en los Estados Unidos. Aprecio la oportunidad que me está dando el juez para seguir adelante con mi agenda de trabajo, entiéndase conciertos y el lanzamiento de mi disco, Mi tesoro norteño. Ya me encuentro en mi casa, en Los Ángeles, disfrutando cada segundo de mí bebé", afirmó el también actor.