Acalorada fue la primera sesión de debate de la Comisión de Salud de la Asamblea del proyecto de Ley sobre sexualidad y salud reproductiva.
El diputado y evangélico Vladimir Herrera afirmó que el proyecto responde exclusivamente a objetivos de movimientos homosexuales y que con el documento se estaría restando autoridad a los padres sobre la conducta de sus hijos.
La afirmación de Herrera le valió el abucheo de los grupos que respaldan el proyecto.
Para la ex legisladora Teresita de Arias, la postura del ex diputado del MOLIRENA es radical y motivada por interpretaciones subjetivas que no figuran en blanco y negro en el texto de la ley. Además, alegó que el "fanatismo" religioso de algunos diputados les impide aceptar los argumentos razonables y las variaciones sociales que vienen dándose desde hace algunos años.