El seleccionador de Brasil, Dunga, alineó ayer toda su artillería pesada, con Kaká, Robinho y Adriano, en el primer entrenamiento táctico antes del partido del próximo domingo contra Venezuela, en la novena jornada de las eliminatorias mundialistas.
Debido a las lesiones de hombres de confianza como Luis Fabiano, Dunga tuvo que innovar en ataque y formar un once inédito en lo que va de eliminatorias, para tratar de recuperar la capacidad goleadora.