Es una hembra de un poco más de dos metros y 90 libras. Es de color marrón y con lunares más oscuros. Es una especie en extinción.
Esta boa de tipo constrictor, se encontraba en los terrenos de Brisas de Amador, en el corregimiento de Ancón, cuando llegaron funcionarios de la administración metropolitana de la Autoridad Nacional del Ambiente y la rescataron.
La dejarán en libertad en una zona más adecuada y donde no represente un peligro para los hombres.