Panamá no está ajena a la crisis financiera de Estados Unidos, "porque directa o indirectamente nos afectará y se hace impostergable tomar medidas al respecto", advirtió ayer Ernesto Bazán, gerente de Equilibrium Calificadora de Riesgo, S.A.
El economista prevé que vendrán tiempos de cambios y reacomodos: fusiones, adquisiciones, compras, ventas, salida de mercados, salida de productos y/o servicios, cambios de estrategia y eventualmente nuevas quiebras que directa o indirectamente repercutirán en Panamá.
Roberto Alfaro, presidente de la Asociación Panameña de Ejecutivo de Empresas (APEDE), aseguró que aunque se dice que la banca local está "inmune", ante la crisis del país norteño, lo que se vislumbra es un sector bancario local más cauteloso a la hora de prestar dinero, es decir, que se avecina una restricción del crédito.
Considera que Panamá en alguna forma va a registrar algunos problemas, en cuanto a la adquisición de nuevos créditos, pero no tan grande como otros países, por la solidez de la banca local.