Estados Unidos está en una guerra declarada contra el terrorismo y muy posiblemente se encuentra al borde de la recesión por el efecto negativo de los actos terroristas del pasado martes. La enorme repercusión económica de los atentados puede ser la puntilla a la crisis de la economía, que ha podido entrar en el tercer trimestre en su primera recesión desde 1991.
Al igual que su padre hace diez años, el presidente estadounidense, George W. Bush, tendrá que enfrentarse a un doble conflicto: bélico y económico. George Bush padre salió triunfante de la Guerra del Golfo Pérsico -aunque el líder iraquí, Sadam Hussein, permanece en el poder en Bagdad- pero la recesión económica lo destruyó políticamente.
Preguntado por la cadena de televisión NBC sobre si el país se encuentra en guerra y en recesión, el vicepresidente, Dick Cheney, afirmó que "es muy posible, ciertamente estamos en guerra contra el terrorismo y no sabemos todavía cómo será el tercer trimestre". Durante el segundo trimestre de este año, la economía creció a un ritmo anual del 0,2 por ciento y durante el tercer trimestre no se han registrado signos evidentes de recuperación. |