El economista Alexis Soto planteó su preocupación ante las dificultades económicas por las que podría atravesar el Banco de Desarrollo Agropecuario (BDA) con la ejecución de la nueva ley fiscal que, entre otros aspectos, reformula el uso del Fondo Especial de Compensación de Intereses (FECI).
Actualmente se establece el FECI como fuente de financiación preferencial para el sector agropecuario y sus cooperativas a través del BDA. El FECI se nutre del 1% de los préstamos al consumo por más de $5, 000. De ese monto el 50% pasa al BDA mientras que el restante 50% pasará al FECI.
Este concepto FECI-Agro cambiará con la aplicación de la reforma fiscal, ya que una parte del FECI será utilizado para cubrir parcialmente el subsidio de los préstamos de interés preferenciales hipotecarios para las familias con necesidades de vivienda propia.
El artículo 47 del proyecto de Ley No. 33 establece que el primer 50% del FECI se dividirá en dos partes donde la primera irá al tesoro nacional para el pago de los tramos preferenciales de los préstamos hipotecarios preferenciales y la segunda se dividirá 30% para el BDA y 20% para la Superintendencia Bancaria.
Del tramo del 30%, luego de constituir las reservas técnicas, se destinará el 75% del fondo al BDA y el 25% restante a las cooperativas agropecuarias mediante préstamo al 1%. Según cifra del 2008, con el FECI se recaudó uno $76 millones, pero con la reforma fiscal se espera que este fondo incremente.
"La recaudación de FECI se estima aumente y por ende las operaciones del BDA no se verían afectados", afirmó el viceministro del MEF, Dulcidio de la Guardia.
El economista Soto pidió a los diputados devolver el proyecto a segundo debate para aplicarle los ajustes pertinentes.
"Es importante incentivar la construcción de viviendas de interés social para mantener el empleo pero esto no debe ser a costa del incentivo al agro. Un balboa invertido en el agro tiene mayor valor agregado, genera más empleos y posee un mayor impacto social y económico que un balboa invertido en la construcción", dijo.
Soto finalizó argumentando que los productores más pequeños dependen del financiamiento que les da el BDA para llevar adelante su actividad. En la medida en que se afecte la liquidez del banco, será menos capaz de financiarlos provocando que abandonen la producción y afectando negativamente el entorno económico de las zonas rurales del país.
DATOS DEL FECI
Según cifra del 2008, con el FECI se recaudó uno $76 millones, pero con la reforma fiscal se espera que este fondo incremente.