Las revelaciones que se hacen en torno al accidentado helicóptero SAN 100 están generando preocupación, por más argumentos y explicaciones que presentan los funcionarios del Ministerio de Gobierno y Justicia.
Ahora aparece un supuesto informe en el que Alexis Camarena, el piloto del mandatario Martín Torrijos, advirtiera en febrero del año 2007, sobre el riesgo de utilizar dicho helicóptero, luego que sufriera un percance cuando transportaba personal de la embajada del Japón.
Si bien es cierto que se pudieron hacer las reparaciones para mejorar la capacidad operativa del SAN-100, el informe de Camarena ha levantado protestas en Chile y no es para menos. En el accidente del 29 de mayo pasado, además de miembros de la Fuerza Pública panameña, murieron oficiales chilenos, entre ellos, el jefe de la Policía de Carabineros, general José Alejandro Bernales.
Ya la familia de Bernales estudia una demanda contra el Estado panameño, sobre todo cuando el informe de Camarena recomendaba no utilizar el SAN 100 para trasladar a personal V.I.P. ni para viajes presidenciales.
Lo peor de todo era que ni el propio jefe del SAN conocía de la existencia del informe en cuestión y hasta ahora que se publican los reportes periodísticos al respecto, es que el Ministerio Público se entera de la advertencia en cuestión.
Ahora lo que corresponde es verificar la autenticidad o no del informe en cuestión, para esclarecer las dudas.
Lo cierto es que mientras las naves del sector privado deben contar con certificados de aeronavegación a las del Estado no se les exige ese y otros requisitos de inspección. Aunque esa es una regla que rige en muchos países, la lógica indica que los gobiernos son los primeros que deben cumplir las leyes del país.