Al menos cuatro brotes de rabia paralítica bovina se han presentado en lo que va del año en Chiriquí y han muerto 17 reses.
Las autoridades de Zoonosis están preocupadas, porque la proliferación de murciélagos hematófagos son los principales transmisores de este virus.
El primer brote se dio en Soloy; luego en las Islas Paridas donde murieron diez reses; posteriormente, se presentaron en Tolé y Nancito.
Guillermo Chen, encargado de Zoonosis, explicó que el jueves viajarán a la comunidad de Nancito para vacunar a todos los perros de esta zona, puesto que ya vacunaron 16 comunidades en el distrito de Tolé.
El MINSA manifestó que las reses se ven afectadas por la constantes mordeduras de murciélagos, quienes riñen en sus madrigueras por la supremacía de la hembra.