El presidente George W. Bush comparó la guerra de Irak con la de Vietnam para justificar su argumento de que es necesario tener más paciencia y no cometer el error de retirarse antes de tiempo de territorio iraquí.
Bush dijo tener claro que "un legado inequívoco de la guerra en Vietnam (1963-1975) es que el precio de la retirada de EE.UU. lo pagaron millones de ciudadanos inocentes".
"Entonces como ahora, algunos argumentaron que el problema era la presencia estadounidense y que si nos retirábamos se acabarían las muertes", pero el tiempo demostró que no fue así, dijo Bush.