Una multitud se lanzó ayer a la calle para recibir al nuevo ídolo de Panamá, el medallista olímpico Irving Saladino. "La fiesta continúa. Esta medalla es de ustedes, así que gócenla", exclamó el atleta ante los panameños que se congregaron en las escalinatas del edificio de la Administración del Canal, donde se le rindió un homenaje y el mandatario Martín Torrijos le entregó un cheque por $50 mil.
Saladino recorrió las calles de Panamá hasta Colón en una 4x4 con ventana en la parte superior y llegó cerca de las 6:00 p.m. a su natal Colón, donde confesó que no tiene novia y que su corazón lo tiene todo el pueblo panameño.