 |
Las víctimas son ancianos.  |
El primer ministro francés, Jean-Pierre Raffarin, defendió ayer la actuación de su gobierno ante la tremenda ola de calor que se dice se habría cobrado hasta 5.000 vidas, bastante por encima de las 3.000 víctimas registradas oficialmente hasta ahora.
En una entrevista con el semanario Le Journal du Dimanche publicada el domingo, el primer ministro conservador dijo que ha sido "presionado" por la oposición respecto a la posible dimisión del ministro de Salud, Jean-Francois Mattei. "Todo esto es ridículo. |