"Yo no vivo del arte, vivo por amor al arte", dijo José Rafael Cruz Pagán.
Él trabaja los diferentes estilos, desde la pintura, dibujos hasta plasmar diseños en los huevos de avestruz. Utiliza el reciclaje para la confección de sus más enigmáticas figuras.
Agregó que se trata de un arte expresionista e impresionista. Las pinturas son para que cualquier persona aunque no conozca nada de arte pueda disfrutar las bellezas de las pinturas.
Espera hacer un cuadro de Chorro Blanco, como una obra emblemática para Boquerón, mientras que sus obras representan la belleza de la mujer panameña en brazo de los conquistadores, la indígena contemplando las guacamayas.
Parecieran que fueran unas fotos gigantes, pero son las pinturas de Cruz Pagán, el pintor y artesano polifacético que les ha regalado a los presidentes más famosos huevos de avestruz con diseños.
Mientras su esposa servía la cena para los invitados de aquella noche que llegaron para la inauguración del museo de Bocalatún, la tierra del guandú, Cruz Pagán explicó que ahora tiene un nuevo proyecto y es escribir un libro basado en historias para estudiantes de primaria.
Quiere hablar con Lucinda Molinar, la ministra de Educación, para ofrecerle de forma gratuita este libro ilustrado con dibujos de su autoría, basado en la historia de un cacique.
La iniciativa de este pintor no termina allí, y pretende contribuir con la cultura de Panamá en el fortalecimiento y el rescate del valor tradicional de los pueblos y provocar un entusiasmo en los jóvenes.
Cruz Pagán no vende su arsenal de pinturas, solo las dona cuando hay una causa para ayudar a alguien.