La Voz del Interior
Boquerón tiene un museo y una sala de exhibición. José Rafael Cruz Pagán instaló en su propia casa más de 100 cuadros que ha pintado, junto a su arte tallado en madera y huevos de avestruz con diseños.
Este pintor, desde los 5 años se dedica al arte. Se trajo para Panamá los recuerdos de la Isla del Encanto, Puerto Rico, junto a su pasión por demostrar en pinturas la llegada de los españoles, la exuberante belleza del Quetzal hasta la exhibición del traje típico de Panamá.
Este ciudadano puertorriqueño es jubilado de la Armada de la Fuerza Aérea de Estados Unidos, a su regreso al país donde conoció el amor de su vida, decidió radicarse en Chiriquí junto a su esposa , una panameña procedente de la provincia de Herrera, y sus dos hijos.
Este soldado ahora es un profesor del arte. Vive de su jubilación y dona sus cuadros a organizaciones benéficas para contribuir con el desarrollo cultural de este pueblo. "Es una oportunidad de enseñarles, a los niños y jóvenes".
Su casa, ubicada en la comunidad de Bocalatún, distrito de Boquerón, la ha convertido en una sala de exhibición de sus más de 100 pinturas, junto a las piezas del arte colonial y de antepasados que vivieron en Panamá.
Cruz Pagán considera que el arte no puede ser una imposición para los individuos, sino para aquellos que aprecian la cultura, por eso, su hogar es el sitio perfecto para recibir a los grupos y personas que verdaderamente aprecian el arte.
Escogió la comunidad de Bocalatún para establecer su residencia y compartir sus exposiciones y trabajos en madera.