Tener la cabecera de la cama orientada al norte, es decir nuestra cabeza estará al norte y los pies al sur, esto es básico debido a que nosotros somos una reproducción del planeta y nuestras corrientes electromagnéticas internas van de arriba a abajo.
Ducharse siempre antes de ir a dormir con agua caliente-templada, nunca fría, pues nos pondríamos nerviosos. Si por la mañana nos queremos lavar con agua fría es bueno porque esto nos revitaliza y nos sirve para mejorar la circulación venosa y arterial.
Usar ropa de algodón cien por cien en nuestros pijamas y sábanas para evitar la estática.
Tener las sábanas y la alcoba limpia, perfumada con algún aroma que nos agrade. Por ejemplo, podemos usar aceite esencial de lavanda vaporizado por la habitación o echarnos un par de gotitas en las sienes o en la almohada.