Carlos Mosquera tal vez nunca llegó a imaginarse, que su incursión en el béisbol lo llevaría a obtener una serie de grandes éxitos, que lo colocarían como uno de los mejores técnicos que tiene en la actualidad las categorías menores.
Oriundo de la provincia de Darién, Mosquera, quien se integró a la dirección de equipos de pequeñas ligas, gracias a su amistad con el expelotero profesional Roy Padilla, manifestó, que todo lo que ha conseguido hasta el momento se lo debe a Dios y en gran medida al apoyo que en un momento le han dado personas como Roy Blake y Plinio Castillo, entre otros. "Le debo mucho a Roy Blake...él me enseñó a mí cómo dirigir", dijo Mosquera. "También le debo mucho a Plinio Castillo, porque me indujo a seguir trabajando en esto", agregó.
Sobre el nuevo reto que se le avecina, ahora dirigiendo a una selección nacional en un torneo mundial, Mosquera dijo que será duro, sin embargo, confía que todo saldrá bien. "Estamos preparados... vamos con la fe en que podemos salir lo mejor posible", explicó.
