Crítica en Línea
Una denuncia por robo en la PTJ fue interpuesta por el fotógrafo de EPASA, Alejandro Méndez en contra de empleados de la empresa ODEBRECH, quienes le quitaron su cámara fotográfica y posteriormente lo obligaron a sacar la tarjeta que contenía las fotos de la agresión de éstos a miembros del Sindicato Único de Trabajadores de la Construcción y Similares (SUNTRACS).
Méndez, quien se encontraba dándole cobertura a lo que sería la paralización de labores en las obras que se realizan de la autopista Panamá-Colón, fue agredido por los integrantes del Sindicato Nacional de la Industria de la Construcción y Perforaciones de Panamá (SINADICOPP), quienes no querían que los representantes del SUNTRACS estuvieran en el lugar.
José Ramos, del sindicato "amarillo", amenazó a los medios presentes y además de Méndez, insultó al camarógrafo de Canal 13, Jaime González , y le dijo que "se fuera del lugar, ya que no tenían que hacer nada allí".
Incluso, amenazó con sacar un arma de fuego para ahuyentar a los comunicadores presentes.
La situación se dio cuando una delegación del SUNTRACS acudió a la sede de la empresa, ubicada a un costado del Camping Resort y fueron recibidos a empujones, puños y patadas por los del otro sindicato.
Esto trajo como consecuencia que dos afiliados al SUNTRACS, David Niño y Adamson Ronald fueran heridos con armas punzocortantes.
Dicha protesta se daría en rechazo a la medida asumida por la empresa de destituir de manera "ilegal" a más de 60 empleados que laboraban en la construcción de esta autopista.
Las cartas de despido que se le dieron a cada uno de los obreros, no contaba con ninguna firma responsable ni el sello del Ministerio de Trabajo.
En tanto, el ministro de Trabajo, Reynaldo Rivera, advirtió que no se puede justificar la violencia. Además dijo que si en una empresa de la construcción o cualquier rama de la industria hay incumplimiento de la ley laboral que debe corregirse, lo primero es darle cuenta a las autoridades de trabajo.
Mientras, los miembros del SUNTRACS protestaron ayer cerrando los Cuatro Altos de Colón, en repudio a la agresión física contra el sindicalista colonense David Niño, y Ronald Galvason, de la ciudad capital, quienes fueron heridos con arma blanca en el sector de Chilibre.