Al menos catorce guardas de seguridad murieron ayer y otros doce resultaron heridos por la explosión de una bomba junto a un vehículo de las fuerzas del orden en el noroeste paquistaní, según fuentes hospitalarias.
El atentado tuvo lugar cuando el vehículo, un autobús de las Fuerzas Aéreas de Pakistán, circulaba por las cercanías de la ciudad de Peshawar, la capital de la conflictiva Provincia de la Frontera del Noroeste (NWFP), según la cadena televisiva "Dawn".
La explosión causó un agujero de tres metros de ancho en la carretera de la localidad de Kohat, desde la que había salido el autobús, que continúa ardiendo mientras los servicios de rescate intentan apagar el fuego. Los heridos ya fueron trasladados a un hospital de Peshawar, según "Geo Tv".
El portavoz del movimiento integrista Tehrik-i-Taliban Pakistan (TTP), el clérigo Omar, reivindicó la autoría del ataque, en declaraciones recogidas por "Dawn".