En la variopinta alianza opositora Coordinadora Democrática (CD) conviven los grandes partidos tradicionales.
Se trata del socialdemócrata Acción Democrática (AD, cinco presidencias desde 1958 y que mantiene la crucial gobernación del petrolero estado Zulia) y el democristiano Copei (dos presidencias y su gobernador del centrano estado Miranda, Enrique Mendoza, es la cabeza opositora actual).Mapa político
Para el analista Miguel Salazar, director del semanario político Las Verdades de Miguel, "la oposición está dirigida por un grupo de ultraderecha joven. Nunca en Venezuela la oposición había tenido rasgos de ultraderecha como ahora", sostuvo.
"Vamos camino a la desintegración de Venezuela si Chávez no se fortalece", dijo al evocar intentos de separación del país petrolero y apuntó que esta ultraderecha se mueve dentro del grupo electoral Súmate y el partido Primero Justicia.
"Hasta ahora la resistencia del gobierno de Chávez ha estado a cargo de grupos de intereses económicos, entre éstos el de los medios y los partidos se han sumado en esa dirección", dijo el experto en geopolítica Alberto Müller Rojas.Debilidades internas
"La oposición quiere que la petrolera estatal PDVSA pase a ser privada. Allí está el error de la oposición, que no está obedeciendo a intereses venezolanos", subrayó en analista.
Además, "el problema de la CD es que tiene grupos radicales que no controla. Chávez sí controla a sus grupos radicales. La violencia del gobierno es mínima; los grupos de oposición son más intolerantes", sostuvo Müller.
Para Müller, si Chávez gana el referendo "los actuales líderes de la oposición se van a desmoronar y, tal vez, el liderazgo de los Salas Romer en Carabobo sea el que sobreviva para las elecciones siguientes (regionales de este septiembre)".