Para los moradores de la playa Santa Catalina, en el distrito de Soná, lo que hasta ahora ha sido una de las zonas de mayor interés turístico de la provincia de Veraguas, podría estar en riesgo de perderse a causa del alto consumo y venta de drogas y por la gran cantidad de desórdenes públicos que se promueven en este sitio.
Y es que la situación del alta demanda que tiene las sustancias ilícitas sobre todo entre los ciudadanos extranjeros que llegan a este lugar, ha provocado que los propios lugareños hayan hecho un llamado a las autoridades de la Policía Nacional, para que presten una mayor atención a lo que ocurre en esta playa.
Pero el problema de la venta y consumo de sustancias ilícitas no es el único, ya que los desórdenes públicos a causa del alto consumo de bebidas alcohólicas, y la proyección de pornografías y actos que riñen contra la moral también están a la orden del día en uno de los pocos lugares turísticos que tiene la provincia de Veraguas reconocido a nivel internacional.
Azael Vásquez, representante del corregimiento de Río Grande de Soná, dijo que en reiteradas ocasiones han expuesto ante las autoridades policiales de la provincia el problema que se está confrontando en esta zona, en donde existe un alto consumo y venta de sustancias ilícitas sobre en ciudadanos de nacionalidades extranjeras.
Según el funcionario, en este momento en el área de la playa Santa Catalina, se requiere con urgencia que se brinde una mayor vigilancia policial, debido a que pese a los operativos que constantemente se hacen en ese lugar el trasiego de estas sustancias se da en un gran volumen. Pero la fuente informó que el problema de la venta y consumo de droga no es la única irregularidad que se registra en este sito.