El volcán Popocatépetl, que registró este fin de semana un período de actividad, está de nuevo en calma, según expertos gubernamentales, mientras los habitantes de la capital mexicana limpiaban el domingo la ceniza que cubrió la ciudad luego de una exhalación del mismo.
Alicia Martínez, portavoz del Centro Nacional de Prevención de desastres (CENAPRED), dijo a la AFP que el Popocatépetl "está en calma", y que "las cenizas fueron producto de tres minutos de actividad del volcán, pero no hay ningún riesgo para la población y ya lleva más de 24 horas sin emitir exhalaciones".
La coordinadora de protección civil federal, Carmen Segura, advirtió en rueda de prensa que la ocurrencia de explosiones y emisiones de ceniza puede "seguir presentándose en las próximas horas y días". Pero el gobierno capitalino descartó que las emanaciones de ceniza del Popocatépetl puedan convertirse en una erupción volcánica de alta dimensión.
El sábado una columna de unos tres kilómetros de altura se levantó por encima del cráter del Popocatépetl y la acción del viento desplazó una nube de polvo fino que se esparció por la ciudad de 22 millones de habitantes, y aunque se aconsejó el uso de barbijos para protección, las autoridades aclararon que su naturaleza no es tóxica. |