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A pesar de que Rabat aseguró que dialogará con España sobre la ocupación del islote del Perejil, sus actos no lo confirman. Según la cadena SER, Rabat ha sustituido a los 12 gendarmes que permanecían en la isla por infantes de Marina. Además, el Gobierno marroquí apostó a un centenar de militares y una fragata en la costa cercana a Perejil.
La cadena SER asegura que los 12 gendarmes que llegaron el jueves pasado a Perejil y que izaron dos banderas marroquíes, han abandonado la isla para dejar paso a otros tantos infantes de Marina, con mayor graduación.
La misma emisora también asegura que los 100 soldados que refuerzan desde el continente la toma de Perejil, están escondidos.
Marruecos reforzó el asentamiento, sustituyendo la tienda de campaña que se instaló por una estructura más sólida: mide unos 6 ó 7 metros de largo por unos tres de ancho, está cubierta con una especie de lona kaki y, al parecer, tiene un tejado rígido a dos aguas, sujeto por dos mástiles, más sólidos que los de la tienda anterior, según pudo ver un reportero gráfico de la agencia EFE.
Desde una ladera del Jebel Musa (colina de Moisés), cerca de un puesto de control marroquí, se divisa perfectamente el islote, a unos 500 metros de distancia, las aguas azules del Atlántico y, hacia el norte, las costas de Tarifa, y el peñón de Gibraltar, al otro lado del Estrecho.
La impresión que da desde la costa es que los barcos españoles, ubicados en aguas adyacentes a la isla, procuran siempre evitar, a mucha distancia, cruzarse con los marroquíes.
Una lancha "zodiac" abastece de comida y agua a las tropas ocupantes, desde la fragata marroquí que patrulla la zona.
La Presidencia de la Unión Europea informó a los Quince de una triple gestión diplomática ante Marruecos, para exigirle el retorno al 'statu quo' en Perejil y a retirar "inmediatamente" sus fuerzas de la isla, informaron fuentes diplomáticas españolas.
España rechazó ayer todas las excusas dadas por Rabat para justificar la invasión e instó a Marruecos a desalojar el islote. |
