La selección de Túnez, siguiente rival de España en el Mundial de Alemania, efectuó ayer el último entrenamiento en Schweinfurt (Baviera), donde tiene su cuartel general, antes de viajar hoy a Stuttgart, donde mañana se disputará este crucial partido.
El entrenamiento estuvo abierto al público y aproximadamente doscientas personas, algunas de ellas ataviadas con banderas tunecinas se reunieron en el estadio Willy Sachs para seguir los movimientos de los hombres que dirige el francés Roger Lemerre.