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Armando Córdoba.  |
El panameño Pedro "Rockero" Alcázar logró el sábado pasado su sueño, coronarse campeón mundial invicto (23-0-1), al destronar en gran forma al hasta entonces monarca supermosca de la OMB, Adonis Rivas de Nicaragua.
Alcázar construyó su triunfo en base a sus extraordinarias condiciones físicas y habilidad en el ring, instalado en dentro del histórico gimnasio Roberto Durán- antes Nuevo Panamá-, donde se realizó el espectáculo boxístico por Promociones y Eventos del Istmo.
En esa misma cartilla los panameños salieron con una noche perfecta, golpeando fino (3-3).
Armando Córdoba encendió las tribunas, prendiendo desde el primer asalto al exdoble campeón mundial venezolano Antonio Cermeño, quien cayó sorprendido en un cambio de golpes, en corto. Allí las cosas comenzaron a pintarse diferente. Córdoba se creció y apostó a sus condiciones, desafiando al "Tigre" Cermeño en su propio terreno, para hacer un duelo hasta el final, donde con algunas variantes cambió el destino final para salir vencedor.
Con esta victoria, la noche parecía comenzar a tener más brillo. Ya el público estaba en ambiente y en espera del choque titular. El mismo llegó a las 11:20 de la noche, con la entrada del todavía campeón Adonis Rivas.
Tras unos minutos de espera entraba el "Rockero" bajo las emotivas letras de la canción Patria, del compatriota Rubén Blades.
Con ese panorama el "Rockero", quien llegó con una "gorrita" y bata que encuadraban el tricolor panameño, estaba listo para la batalla de su vida ante su afición que lo incitó a pelear desde el principio al resonante coro de "Rockerooo...Rockero...y Panamáaa...Panamá. Al final los vitores decían; ahiiii...ahiii...ahiii..., está el campeón". No había otro resultado. Pedro Alcázar se coronaba con una decisión mayoritaria por parte de los jueces boricuas; Nelson Vásquez (116-112) y César Ramos (116-112). El colombiano Manuel Rodríguez, se ajustó con Adonis sirviéndole un 116-114.
"Ahora descansaré un poco. Estoy agradecido al pueblo panameño, a Dios y al promotor Rogelio Espiño, quien ha hecho la realidad de toda esta alegría. Este triunfo dedicado a mi difunto padre, Francisco, es de todos. Gracias por todo el apoyo que me han brindado, pero al gobierno le pido que trate de ayudar al boxeo, que no sea sólo el béisbol y 'marea roja' -fútbol-, dijo el nuevo campeón mundial panameño, quien se une en la actualidad a Mauricio Martínez, monarca gallo en la OMB. |